Cuando tienes un seguro de hogar sabes que, pase lo que pase, conservas el patrimonio que estás iniciando o que has construido con los años , así proteges el lugar en el que vives, los electrodomésticos y muebles, tus elementos personales y hasta las prendas de vestir que usas todos los días.
Si en algún momento ocurre un evento cubierto por el seguro, como un incendio, huracán, derrumbe, entre otros, te reembolsamos el dinero para que sustituyas lo que resulte afectado.
También tienes la opción de obtener coberturas adicionales que te respaldan en caso de robo con o sin violencia, daños a otros y daños o pérdidas de contenidos móviles que pueden estar por fuera de tu vivienda, por ejemplo, computadores portátiles, tabletas o cámaras fotográficas.